La capucha de cuero sintético de privación sensorial aislará y expondrá a la “víctima” ante el resto del mundo.
Tiene tres niveles de cierre. El primero se ajusta con los cordones traseros a modo de corset. Esto nos permitirá ajustar el nivel de presión sobre la cabeza. En segundo lugar tiene correas en el mentón, por detrás de la cabeza y en el cuello a modo de collar. Por último al cerrar con candados (incluidos con el producto) la capucha queda totalmente sellada y aun teniendo las manos libres resultará imposible quitársela.
Esta máscara tiene además acolchamiento en las orejas, ojos y boca. Por eso resulta cómoda y restrictiva, pero sobre todo SEGURA. El acolchamiento de los oídos matiza además el sonido, y en el centro del de la boca se encuentra el único respiradero (nota, a veces el respiradero bucal pueden ser dos agujeros mas pequeño en vez de uno, pero siempre es para colocar a la altura de la boca).
Su material, de cuero sintético, es altamente resistente e inodoro.
No ver, no oír. La sensación de aislamiento y dependencia nos invadirá muy rápido una vez esté colocada. Seremos vulnerables.
Zas Kandil (propietario verificado) –
Te aísla y es sorprendentemente cómoda. Eso sí, lo mejor: la alienación psicológica que causa, perturbadoramente erótica.
Val (propietario verificado) –
Firme pero cómoda. Multiplica las sensaciones.