Cuando practicas BDSM a menudo te descubres pensando diferente gracias a tu sexualidad kinky. Seguro que puedes identificarte con muchas de estas situaciones:
1.- Cuando entras a un bazar “todo a 1€” es como ir a Disneyland.
2.- Al cruzarte con personas con collares ceñidos o de cuero sueles pensar que es porque no son nada vainillas.
3.- Al ver una película en la que atan a alguien siempre te parece una chapuza y que no les están atando como es debido: “¡Pero si se puede escapar!” (sobre todo si practicas Shibari).

4.- Si vas a tiendas de bricolaje tu imaginación se dispara y sale tu manitas del “bricosado” interior. “Oh, que bridas mas maravillosas”, ó “Anda mira estas cadenas!” incluso “Has visto esos listones de madera, podríamos hacer un cepo ideal con ellos!”
5.- El porno tradicional te parece infinitamente falso y aburrido.
6.- Cuando vas a tener una sesión de juego fuera de casa te quieres llevar todos tus juguetes a cuestas. “Por si acaso”
7.- 50 Sombras de Grey te pareció un mal chiste con mucho postureo.

8.- Sabes que decir o ser dicho “zorra” o “perro” en el contexto adecuado es un acto super cariñoso.
9.- Al enseñar una foto en el móvil a alguien tienes miedo de que pasen a la siguiente foto y sea una imagen comprometida de tu última sesión.
10.-Si vas a una tienda de disfraces buscas los atuendos mas fetichistas. “Seguro que este outfit de gatita sexy le doy uso también después de la fiesta!”